Esta divertida acción urbana del fabricante de coches Smart consigue convertir una sencilla luz de semáforo en una forma de interactuar con la gente por su propia seguridad. La idea se basa en hacer que la espera ante un semáforo no sea un tiempo perdido, sino un momento de entretenimiento. Para ello, se construyó una cabina de baile con cámaras que traducían los movimientos de los transeúntes en una silueta de luz roja de un paso de peatones. Gracias al éxito de esta campaña, se consiguió que un 81% más de personas se detuviesen con la luz en rojo, en lugar de saltarse la señal. La pieza fue creada para la campaña de promoción de la seguridad WhatAreYouFOR.