Deliciosa la acción organizada en Dinamarca por la gente de Robert/Boisen & Like-minded para la dulce marca de chocolates Anthon Berg.

La marca abrió por un día “The generous Store”, la primera tienda de chocolate del mundo en la que no se puede pagar con dinero ni tarjetas. Sólo se aceptan buenas intenciones.

La gente arrasó con sus existencias a cambio de promesas de buenas intenciones para con sus seres queridos. Como no podía ser de otra forma con los tiempos que corren, se dio continuidad a la acción en las redes sociales (concretamente en Facebook), donde cada uno dejaba constancia de sus promesas en el muro de sus destinatarios. Una buena forma de cerciorarse de que todo el mundo cumpliera con su palabra.

Una acción con buenos resultados, ya que aúna estrategias offline y online, pasando por la experiencia de compra en el punto de venta.

Si queréis ver cómo seguir siendo generosos, visitad su perfil en Facebook: www.facebook.com/anthonberg.dk

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